Otro de los grandes éxitos del Studio Ghibli, aunque quizá menos conocido que el viaje de Chihiro, nos sitúa en un mundo de fantasía en el que la guerra y la magia luchan de la mano para conquistar el mundo, mientras una joven es maldecida por una bruja y trata de encontrar su lugar entre tanto caos.
Aunque la película nos cuente la historia de esta joven, la mayoría de los personajes secundarios son de vital importancia, y en todos ellos encontraremos personalidades únicas y entrañables.
Lo que me gustaría destacar de este film son los deseos de las personas, pues todo en este mundo se mueve en función de ello y las decisiones que toman las personas para alcanzarlos, algunas más acertadas que otras. Podemos ver cómo la amistad y el amor resuelven maldiciones irremediables, como el perdón se vuelve agradecimiento, y sobre todo, el poder que tienen los sueños en nuestra vida. Puede que no sean temas curriculares para trabajar en un aula, como podría serlo la guerra y sus efectos en la sociedad (aspectos que también se pueden trabajar con esta película), pero para mí tienen aún más valor todas estas premisas. Todos necesitamos un sueño que perseguir para levantarnos por la mañana, personas a nuestro alrededor que nos apoyen y la ilusión para cumplirlo. Y nunca está de más educar a las personas para que aprendan a confiar en sí mismas, a compartir esos sueños y a apoyarse mutuamente.
– Me encuentro mal, como si tuviera un gran peso en el pecho…
– Un corazón es una carga muy pesada.